Todavía no conozco a ningún ciclista que si quiere andar y estar bien no salga a entrenar. Algunos de ellos acuden a un preparador para que les programe y les guíe el entrenamiento, y otros hacen como Juan Palomo ("yo me lo guiso, yo me lo como"), y los que falta simplemente salen a entrenar (sin orden ni concierto).
A la hora de hacer una planificación del entrenamiento, creo que es útil y práctico tener claro el significado de algunos términos básicos. Son los siguientes:
Trabajo. Mantener una fuerza durante un tiempo. Al pedalear aplicamos una fuerza capaz de vencer las resistencias que nos encontramos y así poder avanzar. Y este trabajo varía en función de la fuerza aplicada. Fuerza y tiempo son las dos variables que adaptamos y adecuamos al trabajo que pretendemos realizar. El trabajo del ciclista varía en función de la época del año y del objetivo perseguido.
Energía. Es la capacidad que tenemos para realizar el trabajo. Y podemos hablar de 2 tipos: energía potencial, la que posee un cuerpo debido a su posición en el espacio y energía cinética, la que tiene todo cuerpo por estar desplazándose. Pero vamos que sin ella, pues como que la cosa no va. Vamos que no.
Potencia. Es la realización de un trabajo por unidad de tiempo. Se mide en watios. Realmente es la unidad de media del trabajo. Ultimamente este concepto se ha puesto muy de moda (los nuevos inventos). Pero los que no somos muy modernos seguimos usando las pulsaciones como referencia y que también nos sirven.
"No luches con un hecho. Reconócelo"
Hugh Prather
Resistencia. Un ciclista para avanzar genera la potencia necesaria para que vencer la suma de las 3 resistencias que se encuentra en el camino: Resistencia a la rodadura, resistencia aerodinámica y resistencia a la gravedad. Según sea el momento y lugar dónde se encuentre unas son más importantes que otras.
- Resistencia a la rodadura: influida por el firme que pisamos (asfalto, cemento, tierra), tipo de neumático utilizado (a mayor grosor, más dolor), presión de inflado de la rueda (con poco aire mucho cuesta), y el diámetro de la rueda (las 29 son mejores para rodar)-.
- Resistencia aerodinámica: la que nos ofrece el aire, a mayor velocidad mayor resistencia, además con aumentos exponenciales. Quiere decir que la resistencia para subir la velocidad de 15 a 20 km/h es muy muy inferior que pasar de 45 a 50 km/h. (en los dos casos aumento 5 km/h pero como que no es lo mismo, ¿verdad?). En llano es cuando esta resistencia cobra todo su fuerza, y una buena rueda a la que seguir es la mejor energía que podemos usar.
- Resistiencia a la gravedad: es la fuerza gravitatoria que surge al elevarnos y en la que el peso ciclista+bici es vital. Cuando la carretera se empina es cuando luce en todo su esplendor y la anterior es meramente testimonial.
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